Bueno, ayer vi esta película (Control, la vida de Ian Curtis). Y si hay alguien que llora viendo películas soy yo, pero no fue el caso, la soporté bien, atenta, fascinada y ya, terminó. Cuando llegó a su fin nos tiramos en la cama boca abajo como si nos hubiera pasado un ejército por encima. Muy jodido, boluda, dijo él, y yo me puse a llorar. Al rato le pregunté si había conocido a alguien que se haya suicidado y me respondió que fuéramos a cocinar algo así no pensábamos en esas cosas. Le dije que yo quería saber, y me contó.
Hablamos de todo eso y compartí con él algunas cosas que me están pasando últimamente, por ejemplo respecto a Sole -mi amiga que falleció hace unos años- y respecto a la muerte y la sinceridad o no y los problemas y pensamientos de la gente que sufre y la que es feliz y la que toma el control y el amor que nos separará otra vez y bla. Me puse a llorar muy angustiada. Decidí escribir respecto a todo eso, un cuento.
Él dijo que no deberían haber hecho una película así, yo dije que si un chico de, por ejemplo, 15 años, depresivo, ve esa película, se suicida. Por eso, dijo él. Pero yo agregué que no era más que un engranaje del mecanismo, como cuando en las películas muestran una encomienda recorriendo el mundo hasta llegar a manos de quien tiene que llegar. Bueno, así. Alguien hace la película, alguien la ve, alguien se mata... cosas que tienen que pasar. ¿Cosas que tienen que pasar? Él dijo que había entendido lo que yo quería decir.
Él habló del suicidio como "obra maestra" en algunos casos, como una manera de hacerse cargo de lo que uno es y no seguir con una mentira que no se tolera. Yo dije que entendía lo que quería decir. También hablamos del respetable egoísmo del suicida que sólo piensa en su dolor, y del respetable egoísmo del que se queda, que no soporta que alguien haya tomado esa decisión sin tenerlo en cuenta. No hablamos de ninguna "verdad", por así decirlo; simplemente verbalizamos situaciones y ejemplos en voz alta; teorías, posibilidades, almas.
Hablamos de muchas cosas, y él dijo que no volvería a ver esa película.
Hablamos de todo eso y compartí con él algunas cosas que me están pasando últimamente, por ejemplo respecto a Sole -mi amiga que falleció hace unos años- y respecto a la muerte y la sinceridad o no y los problemas y pensamientos de la gente que sufre y la que es feliz y la que toma el control y el amor que nos separará otra vez y bla. Me puse a llorar muy angustiada. Decidí escribir respecto a todo eso, un cuento.
Él dijo que no deberían haber hecho una película así, yo dije que si un chico de, por ejemplo, 15 años, depresivo, ve esa película, se suicida. Por eso, dijo él. Pero yo agregué que no era más que un engranaje del mecanismo, como cuando en las películas muestran una encomienda recorriendo el mundo hasta llegar a manos de quien tiene que llegar. Bueno, así. Alguien hace la película, alguien la ve, alguien se mata... cosas que tienen que pasar. ¿Cosas que tienen que pasar? Él dijo que había entendido lo que yo quería decir.
Él habló del suicidio como "obra maestra" en algunos casos, como una manera de hacerse cargo de lo que uno es y no seguir con una mentira que no se tolera. Yo dije que entendía lo que quería decir. También hablamos del respetable egoísmo del suicida que sólo piensa en su dolor, y del respetable egoísmo del que se queda, que no soporta que alguien haya tomado esa decisión sin tenerlo en cuenta. No hablamos de ninguna "verdad", por así decirlo; simplemente verbalizamos situaciones y ejemplos en voz alta; teorías, posibilidades, almas.
Hablamos de muchas cosas, y él dijo que no volvería a ver esa película.
4 comentarios:
ya la puse a bajar.
alejo: no es un desaparecido, estaba ahí viendo control!
ÉL estaba ahi viendo Control ... se entiende, no?
se entiende, pero no sé por qué creen que él es él.
*misterio*
yo también me acordé de sole hace poco. Abrí una caja que no abría hacía tanto y encontré un par de cartas de ella. También una tuya...y cosas que escribía en esa epoca. Viste qe hay que estar preparado para abrir esas cajas...? Y sí,lloré,lloré bastante...sabía que iba a llorar tanto.
También me encontre con unos poemas que escribí en la secundaria que dan ganas de vomitar. Ahí sí, me reí mucho y cerré todo.
Ciclos, no?
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